11 cosas que ver y hacer en Viena en otoño

El otoño es una de las estaciones que más saca a relucir la belleza de todo lo que hay que ver en una ciudad como Viena. El clima es generalmente fresco y sobre todo impredecible. En cualquier caso, en los meses de otoño se pueden hacer muchos planes para cada uno de los posibles escenarios que nos encontremos.

Son muchas las posibilidades de Viena en los meses de septiembre, octubre y noviembre y por ello en este post he hecho una selección de mis planes favoritos para hacer en Viena en otoño. Sigue leyendo y descúbrelos.

En septiembre, la llegada del otoño coincide con el comienzo de la temporada de óperas en Viena. Dado que Viena es considerada como la ciudad de la música, la ópera de la ciudad es todo un símbolo de la misma y es una de las mejores actividades que hacer en la capital.

La ventaja de hacerlo al comienzo de temporada es que hay descuentos en las entradas y más pases para las obras. Es un plan perfecto especialmente en los días de frío de otoño.

Otra opción es hacer un tour guiado por el edificio de la ópera en el que además de maravillarte con su arquitectura, te explicaran con todo lujo de detalles la historia y funcionamiento de la opera. En el comienzo de temporada también es habitual que en algunas de las óperas instalen una pantalla gigante en la fachada del edificio para verlas desde fuera.

Información de interés

• Dirección de la ópera: Calle Opernring 2
• Precios aproximados: desde 10 euros.
• Otros teatros de ópera en Viena: Volksoper (Opera popular de Viena), Musikverein, Konzerthaus.

El Palacio de Schönbrunn es una visita imprescindible en cualquier época del año. Pero es en otoño cuando, en mi opinión, es especialmente recomendable. Esto se debe a que el principal encanto del palacio reside en sus jardines y estos lucen espectaculares con los colores rojizos y amarillos del otoño.

El palacio fue declarado Patrimonio de la Humanidad y aunque para entrar a sus dependencias hay que pagar entrada, la visita a sus jardines es totalmente gratuita. No te arrepentirás, pues por algo Viena también se ha ganado el sobrenombre de ciudad de los palacios.

Si, además de sus jardines, quieres conocer el interior, te recomiendo hacer un tour por el Palacio de Schönbrunn y así matar dos pájaros de un tiro.

Visitar el parque del Prater es también casi obligatorio por los mismos motivos que antes. Gracias a los colores de los árboles en otoño, el parque se transforma y se convierte en una preciosa zona donde evadirse del gentío de la ciudad.

Es el parque más grande de Viena y en su vasta extensión encontramos, entre otras cosas: un parque de atracciones, pistas deportivas, un estadio de fútbol e incluso una peculiar casa declarada como república independiente.

Si el tiempo acompaña suele ser una zona bastante frecuentada para hacer picnics, pasear o hacer deporte. Pero mi parte favorita del parque es cuando se visita la noria gigante junto al parque de atracciones, ya que desde arriba tiene unas vistas del parque y de toda la ciudad espectaculares.

Es inevitable que en otoño nos pillen días de frío y de lluvia. Esos días son perfectos para optar por los planes en interior que te propongo a continuación.

Visita los museos de Viena

Algunos de los mejores museos de Viena que puedes visitar son:

• Kunsthistorisches Museum: es el Museo de Historia del Arte de Viena y tiene la increíble colección de arte de los Habsburgo donde hay obras de Rubens, Rembrandt, Caravaggio, Tiziano, Rafael y Velázquez, entre otros.
• Museo Albertina: contiene dibujos y grabados de autores como Monet, Renoir, Degas, Chagall, Miró, Da Vinci, Magritte, Munch o Picasso.

Relájate en uno de los preciosos cafés

Para conocer más planes contra los días nublados solo hay que hacer caso a los propios vieneses. Y a estos les encanta refugiarse en las cafeterías acompañados de un buen café y unos buenos dulces.

Algunos de los mejores cafés de Viena son:

• El café Central
• El café Frauenhuber
• El café Museum
• La cafetería del hotel Sacher, donde se originó la famosa tarta, son.

Muchos lugares de los alrededores de Viena se tiñen de un color especial en otoño. Y lo mejor es que puedes visitarlos haciendo alguna excursión organizada a la zona, o yendo por tu cuenta si así lo prefieres.

Para mí, hay dos sitios con un encanto particular en esta época del año y quiero recomendártelos a continuación:

• Excursión a Wachau desde Viena: esta región vinícola tiene unos valles preciosos que adquieren unos colores espectaculares en otoño. Además, uno de sus pueblos, Dürnstein, es Patrimonio de la Humanidad.
• Excursión a Hallstatt desde Viena: es uno de los sitios más famosos de Viena conocido por sus vistas espectaculares de los Alpes y por su mirador skywalk.

El día 26 de octubre, en pleno otoño, se celebra el Día Nacional de Austria. En esta fecha se conmemora el día en el que, en 1955, Austria obtuvo su independencia total como país.

Por supuesto el grueso de las celebraciones se dan en su capital, Viena, y es un gran día para estar por la capital austriaca. El eje central de esta fiesta es el gran desfile militar que pasea por las calles del centro de la ciudad.

Aunque, como es fiesta nacional, hay que tener en cuenta que muchos de los monumentos cierran. Pero a cambio en este día se permite la entrada a lugares como el Parlamento, o los ministerios y permanecen abiertos museos como el de historia militar o la biblioteca nacional con entrada gratuita.

La colina de Kahlenberg es otro de los puntos pocos conocidos de Viena que realmente merece la pena visitar. No por el lugar en sí, que también, sino principalmente por las vistas desde lo alto de la colina a 484 metros.

Las vistas panorámicas de Viena desde este punto son espectaculares y me atrevería a decir que unas de las mejores de toda la capital.

El entorno también está a la altura, ya que se encuentra en medio del conocido como bosque de Viena y rodeada de viñedos que en otoño tienen unos colores rojizos y amarillentos que mejoran notablemente las vistas. Desde la cima, donde se encuentra la iglesia de St. Josef, salen un montón de rutas perfectas para hacer senderismo.

En otoño se condensan la mayoría de fiestas y festivos importantes en Viena como son: el Día de Todos los Santos, el Día de la Inmaculada Concepción o el Día de San Martín. Cada día tiene sus celebraciones peculiares pero yo te voy a destacar las actividades que hacer en dos fechas señaladas:

• Visitar los cementerios de Viena: mejor ir uno o dos días antes del Día de los Santos para evitar la multitud. En los cementerios de la ciudad descansan grandes figuras como son Beethoven y Johann Strauss en el cementerio central, o Mozart cuya tumba está en el cementerio de St Marx.
• Celebrar Halloween en el parque de atracciones del Prater : este se engalana con una decoración terrorífica y hay atracciones especiales como una casa del terror.
• Ir al museo dedicado a la tortura: es especialmente visitado el 31 de octubre.
• Prueba los dulces típicos: para endulzar un terrorífico día en muchas de las pastelerías de la ciudad preparan dulces temáticos para Halloween.

En el mes de octubre tiene lugar un festival muy importantes en el ámbito cultural de Viena. El Festival de música contemporánea, comienza en octubre y se alarga hasta noviembre con una serie de actuaciones de música clásica, jazz o rock. Todos ellos con un estilo contemporáneo.

El escenario principal de este festival es el conocido Wiener Konzerthaus. Cómo ves el otoño es una época de mucha actividad cultural en Viena.

El Setagayapark no suele figurar en las guías de viaje por lo que es considerada como una de las joyas escondidas de Viena. Se trata de un parque de estilo japonés situado al norte de la ciudad casi en las afueras.

Aunque es pequeño y se puede recorrer entero en unos 15 minutos, es muy bello y especialmente con los colores del otoño. Desde el centro de la ciudad se puede llegar cogiendo el bus 1A o el tranvía 37 en una media hora. Es un lugar perfecto para visitar en esos casos en los que te sobra tiempo y buscas ver algo diferente.

Además el parque solo abre desde abril hasta finales de octubre por lo que en otoño, además de cuando más bonito esta, es una de las últimas oportunidades del año de visitarlo. El horario del parque es de 7:00 de la mañana hasta las 20:00.

El Naschmarkt es el mercado más conocido y grande de Viena. En su extensa superficie se encuentran más de 120 puestos, restaurantes y cafeterías que lo convierten en un punto de encuentro y de ocio para los vieneses.

Hay dos motivos por los que visitarlo en otoño. El primero es por los productos de temporada que encontrarás en sus puestos:

• Las típicas castañas abundan.
• Llegan las primeras remesas de vino de las cosechas cercanas a Viena.
• La mermelada de albaricoque tradicional de Austria que se deja madurar al sol en verano y se empieza a consumir en otoño.

El segundo es que suele estar abarrotado especialmente en primavera y verano, por lo que los meses de otoño hay menos afluencia turística y es mucho más cómodo visitarlo.

El clima de otoño en Viena es sobre todo fresco, pero sin llegar a ser excesivamente frío. Las temperaturas máximas van disminuyendo progresivamente desde los más de 20 grados que puede hacer en septiembre hasta los 5 grados de media en el mes de noviembre.

Con las mínimas pasa lo mismo y bajan desde los 13 grados hasta alcanzar incluso los 0 a finales de otoño. Pero en general son temperaturas muy agradables para ver Viena.

Lo más negativo del otoño es su imprevisibilidad, ya que el tiempo cambia mucho y pasa rápidamente de estar soleado a estar nublado. Eso sí, la probabilidad de lluvia baja y apenas supera el 20% de media.

La gran ventaja que tienen los meses de otoño es que las temperaturas son muy llevables y la afluencia de turistas no es muy alta. Por lo que es una época ideal para viajar a Viena en este sentido. A partir de septiembre el número de visitantes baja considerablemente y no suele haber problemas para encontrar alojamientos ni espacio en los monumentos.

Los precios también bajan algo por la bajada de la demanda aunque en general Viena es una ciudad cara de visitar. Algo que compensa con creces con su belleza. En resumen y como apreciación personal, el otoño es una estación ideal para visitar la capital de Austria.

El tiempo será lo que más nos condicione a la hora de hacer el equipaje para visitar Viena en los meses de otoño. Para ayudarte en esa ardua tarea te dejo una lista con lo imprescindible que no debe faltar en tu maleta. Y como ayuda extra en este enlaces tienes unos consejos muy útiles para tu viaje a Viena.

• Ropa abrigada pero sin excederse. Basta con un jersey y un abrigo fino.
• Si viajas en noviembre el frío empieza a ser más intenso por lo que en esa época el abrigo se vuelve más necesario.
• Chubasquero, paraguas y prendas impermeables no deben faltar.
• Calzado cómodo ya que Viena invita a pasear mucho por sus calles.