10 cosas que hacer en Milán en con Niños

Milán es la ciudad perfecta para que lleves a los niños. Basta que pienses en las hermosas iniciativas de los museos de Milán dedicadas a los niños y en los numerosos eventos familiares que se organizan con frecuencia en la ciudad.

Milán también está llena de parques y rincones maravillosos para descubrir con los más pequeños. Además, es una ciudad que está bien comunicada por transporte público y que puedes intentar explorar en bicicleta. Si buscas que ver y hacer en Milán con los niños, aquí te dejamos una variedad de sugerencias que te encantarán.

Reservar entradas al Museo Nacional de la Ciencia y la Tecnología es acertar de pleno. Contiene algunos de los inventos más importantes a lo largo de los siglos. Es el lugar ideal para cultivar la curiosidad innata de tus niños y estimularlos a pensar de forma lúdica en las maravillas del mundo científico.

Entre exposiciones, actividades y talleres, tus chicos pueden explorar la química y las matemáticas, investigar las propiedades de los materiales y la energía, desarrollar la conciencia medioambiental y mucho más. La colección también incluye modelos de máquinas extraídos de los dibujos de Leonardo da Vinci.

A los niños les encantará la experiencia submarina y las exposiciones astronómicas. También son magníficas las exposiciones permanentes, que abarcan desde el mundo del transporte hasta las telecomunicaciones, con un enfoque interactivo y apto para tus niños.

El Castillo Sforzesco es un lugar que cautiva a adultos y niños por igual con su historia que espera ser descubierta. Parece salido de un cuento, con foso, torres almenadas, patios sucesivos y pasadizos secretos.

Está ubicado en la Piazza Castello y podrás ir con los niños en cualquier momento del año. Y lo mejor de todo es que puedes reservar una visita guiada al Castillo Sforzesco para grupos pequeños, donde el guían adapta la visita a los más pequeños y a las familias.

Además, en el Castillo Sforzesco de Milán hay muchas actividades para las familias: todos los fines de semana hay talleres creativos, juegos, búsquedas del tesoro o visitas guiadas para niños de 4 a 12 años.

Este templo puede ser un lugar fascinante para tus niños. Aquí los pequeños se encontrarán inmersos en un mar de mármol de más de 3000 esculturas, sin duda lo más interesante que se puede ver al reservar un tour por la catedral de Milán.

Y si van por encima de las agujas de la Catedral de Milán podrán observar la ciudad desde lo alto. Es un recorrido de 60 minutos, imprescindible cuando vas a Milán con niños.

Puedes pasear tranquilamente para admirar las agujas y llegar a la terraza y ver la estatua dorada de la Madonnina, que es un verdadero símbolo de la ciudad.

El MUBA de Milán es el Museo de la Infancia. Es un centro innovador dedicado a proyectos culturales para niños que estimulan el pensamiento creativo de tus niños, invitándolos a tocar, jugar y experimentar.

Situado en el pintoresco entorno de la antigua iglesia de San Michele, dentro de la Rotonda della Besana, está en un edificio del barroco con una gran historia que data de finales del siglo XVII.

El MUBA alberga una librería bien surtida con libros para niños de todas las edades y un bistró con productos y menús diseñados especialmente para los más pequeños. Después de visitar el museo, puedes llevar a los niños a jugar en el hermoso parque que hay dentro de la Rotonda.

Información Práctica

• Ubicación: Vía Enricon Besana 12.
• Horario: de martes a viernes de 9:30 a 18:00 horas. Fin de semana y días festivos de 10:00 a 18:30 horas.
• Precio: 8 euros niños y adultos 6 euros. Existe una entrada especial para familias de 4 personas por 25 euros.
• Duración: Entre una y dos horas para recorrerlo y disfrutarlo.

Pasear por los hermosos jardines Indro Montanelli y los de Villa Reale con los niños será una gran experiencia. Los más pequeños pueden corretear entre pequeños lagos, puentes, cuevas e incluso un pequeño templo.

En el interior de los jardines Indro Montanelli se encuentran el Planetario Cívico, el más grande de Italia, y el Museo Cívico de Historia Natural, que bien merecen una visita, especialmente si viajas con jóvenes aficionados a la astronomía o la zoología.

Si quieres incentivar el amor por el arte contemporáneo, el Pabellón de Arte Contemporáneo (PAC) dentro de la villa, merece una visita. Recuerda que en los Jardines de la Villa Reale, está prohibida la entrada a los adultos sin niños.

A tus niños les apasionará la experiencia en el Planetario Ulrico Hoepli, donde podrán saber sobre las estrellas. Está ubicado en los jardines de Porta Venezia y, con toda seguridad, este es un destino ideal para llevarlos.

Aquí hay actividades frecuentes y observaciones guiadas para los niños. A través de espectáculos y cuentos de hadas, los más pequeños pueden acercarse a los grandes misterios del cosmos de forma ligera y entretenida.

El museo está a un paso del Planetario y es uno de los museos de historia natural más importantes, no solo de Italia sino también de Europa.

En este museo puedes dar a los niños una grata experiencia educativa. Aquí conocerán maravillosas muestras de mineralogía y paleontología, tendrán valiosa información sobre la historia natural del hombre y se adentrarán en ese mundo que tanto les gusta sobre los animales.

Es un edificio caracterizado por un estilo neogótico, decorado con terracota, diseñado en 1888 por el arquitecto Cerruti. El edificio se construyó entre 1892 y 1907 y es el más grande de Italia y puede estar considerado entre los más importantes de Europa.

A los más pequeños les encantará esta plaza que parece sacada de una película de ciencia ficción.

Aquí se alza el rascacielos más alto de la ciudad: la Torre Unicredit,, del arquitecto argentino César Pelli. Sobre esta torre se eleva una estructura de 78 metros de aguja que se ilumina por la noche en ocasiones especiales.

También son fascinantes las fuentes infinitas de la plaza, que se llenan de color por la noche. Además, está cerca el Bosco Verticale, un rascacielos cubierto de plantas, proyecto del arquitecto Stefano Boeri.

Los entornos marinos y fluviales reconstruidos te encantarán, y a los niños más aún. Este acuario lo encontrarás en el Parque Sempione, el cual puedes recorrer también en un tour por Milán en bicicleta.

Este es el tercer acuario más antiguo de Europa, inaugurado en 1906 para la Exposición Internacional de Milán. El interior de la instalación es un recorrido circular que se puede hacer en una hora aproximadamente.

La parte que más entusiasma a los niños es el túnel transparente que pasa por encima de nuestras cabezas, donde rayas y peces de diferentes tamaños nadan de derecha a izquierda y viceversa. Hay una variedad de actividades para niños de todas las edades, como las que te describimos a continuación.

Si vas a Milán con niños, reserva algo de dinero para obsequiarles con un bello juguete de Nano Bleu. En esta juguetería tendrás tres plantas y más de 350 metros cuadrados en los que perderte entre juguetes de todas las formas y tamaños.

La histórica juguetería Nano Bleu es el paraíso para cualquier niño. Abierta en 1949, se encuentra a pocos pasos del Duomo.

Ya sean peluches, muñecos, bloques de construcción o juegos de mesa, Nano Bleu es el sitio perfecto para colmar de regalos a tus hijos.