Qué ver y hacer en Binibeca en Menorca

Visitar Menorca y no acercarse a recorrer Binibeca es imperdonable. Te indico diez cosas que ver si estás de paso en este pueblo singular

Andressa García

Andressa García

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Qué ver y hacer en Binibeca en Menorca

Menorca | ©Steve.

Binibeca es un pueblo de pescadores que empresarios visionarios construyeron hace unas cuántas décadas para brindar mayor impulso turístico a la isla de Menorca y lo lograron. Su peculiar construcción llama la atención de turistas de todo el mundo, que incluyen a esta localidad entre los pueblos más atractivos de la isla.

La intención inicial de estos empresarios era atraer a intelectuales y artistas que buscasen un lugar de inspiración. En la actualidad, se ha convertido en centro de atracción para fotógrafos profesionales. Ahora ya lo sabes, si vas a Menorca, Binibeca es un paraje obligatorio que no puedes dejar de visitar.

1. Recorre las estrechas calles y callejones de Binibeca

Calles de Binibeca | ©Barry Whitmore
Calles de Binibeca | ©Barry Whitmore

Para empezar tu visita en Binibeca, tienes que perderte por sus estrechas calles. A pesar de la uniformidad en el color blanco de sus paredes y cada una de sus casas, Binibeca no deja de ser un pueblo colorido y acogedor. Si reservas una excursión por Mahón que incluya la localidad de Binibenca, te impresionarás y te inspirarás viendo cómo se confunden las estructuras de madera contrastando con las limpias paredes.

Tanto ventanas, como puertas y balcones son de madera, para darle al pueblo una sensación de mayor autenticidad. Aunque no se trata de una auténtica localidad de pescadores, sí que es un atractivo turístico digno de visitar y, sobre todo, de enamorarse. En muchos lugares te encontrarás carteles de silencio y es que, además de un lugar turístico, se trata de un lugar donde viven personas.

Llama la atención la delicadeza con la que fueron fabricadas sus calles. Los empedrados pasajes que recorren la población le aportan un aire mucho más clásico que hace recordar a las islas griegas con los mismos detalles. Todas estas características te harán amar cada espacio que recorras de Binibeca, sin dejar de lado las hermosas vistas del mar que se aprecia desde las escaleras y pasillos.

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2. Visita los lugares más emblemáticos de Binibeca

Iglesia de Binibeca | ©Fani
Iglesia de Binibeca | ©Fani

Por supuesto, al ser un poblado tan popular, si reservas una excursión por Binibenca, no solo verás calles y callejone entrelazados. Este urbanismo tan peculiar cuenta también con múltiples sitios interesantes para visitar y conocer como:

  • La Plaza Mayor: forma parte del complejo inicial del pueblo y se encuentra ubicada en el centro del conjunto residencial, siendo de las zonas más amplias entre tantos callejones y calles tan angostas. Un sitio tranquilo donde podrás sentarte un rato antes de seguir tu travesía a pie por todo el pueblo.
  • Iglesia de Binibeca: una de las primeras edificaciones que se levantaron en el conjunto, por lo que su estructura es bastante tradicional, intentando mantener el aire de pueblo pesquero original. Esta iglesia se erige por encima de todas las demás casas del lugar, siendo de los edificios más altos y que se puede apreciar con mayor facilidad si se mira desde lejos.
  • Paseo Marítimo: ubicado en las orillas de este pueblo mágico e idílico, te hará sentir como en una auténtica postal. Destacan sus calles empedradas y su ambiente bastante dinámico, sobre todo en horario nocturno.
  • Casa Candi: fue la primera construcción habitacional que se realizó en todo el sector, por lo que sus paredes cuentan más que historia.

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3. Haz snorkel en Cala Torret

Esnórquel en Binibeca | ©Jakob Owens
Esnórquel en Binibeca | ©Jakob Owens

Cala Torret es una coqueta cala que se ubica muy cerca de Binibeca. Puedes llegar a ella haciendo uso del transporte público, pero si vas en coche, también es una forma cómoda de visitarla.

Uno de los atractivos de esta cala es que en su muelle se encuentran múltiples embarcaciones de propiedad privada, pero también otras dispuestas para el alquiler. Una buena actividad que puedes hacer en ella es reservar una excursión en kayak con snorkel.

El esnórquel es de las actividades que más te recomiendo porque podrás ver diversas especies animales marinos, además de disfrutar de sus aguas claras y de color turquesa. Es una cala con sus alrededores rocosos, pero que no deja de ser cómoda de visitar y divina para bañarse.

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4. Disfruta de la tranquila playa de Binibeca

Playa de Binibeca | ©José Antonio Adame
Playa de Binibeca | ©José Antonio Adame

Una vez que hayas recorrido el pueblo de Binibeca, otra excelente opción para continuar con tu recorrido, es dar un paseo por la playa. Se trata de una pequeña playa ubicada en medio de arena blanca y muy fina y un tupido bosque de pinos. Este último le imprime aún más tranquilidad y esplendor al diseño natural.

También conocida como Cala Binibeca, este paraje te va a encantar si visitas esta población gracias a lo solitaria que puede ser en algunos momentos del año. Tiene una capacidad pequeña de turistas y es por eso que se convierte en un lugar especial si quieres tener una visita tranquila, relajada y cómoda.

Sus aguas poco profundas la convierten en un destino ideal para ir con niños, por lo que ellos podrán divertirse y bañarse sin correr alto riesgo. Digamos que es una playa compartida entre Binibeca Vell y Binibeca Nou. Es una playa perfecta para ir de buceo y uno de los sitios que definitivamente te recomendaría si quieres reservar un tour de esnórquel en Menorca

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5. Admira las embarcaciones de Cala de Biniancolla

Cala de Biniancolla | ©Guzman
Cala de Biniancolla | ©Guzman

Cala Biniancolla es un lugar tranquilo que tiene a sus pies un hotel. Pese a ello, parece ser un refugio reservado a pescadores y curiosos que se acercan a apreciar la soledad del paisaje y, sobre todo, a contemplar el azul turquesa que se puede ver en los alrededores de esta cala. Es, definitivamente, un buen lugar para acercarte a ver a los pescadores.

Alrededor de la Cala de Biniancolla se encuentran múltiples casas que forman parte de Binibeca Vell. Está rodeada de rocas que completan su paisaje de cala virgen y es un buen destino para quien busca estar alejado de la gran cantidad de personas que habitualmente hay en una playa más popular de Menorca.

Si estás buscando un buen lugar para ver el atardecer en Menorca, definitivamente es ideal. Es un lugar de inspiración, mágico y de ensueño. Es de fácil acceso y para llegar podrás tomar el transporte público. En caso de que quieras hacer un aperitivo,*cerca de la cala podrás encontrar un restaurante cuya carta de aperitivos y platos te va a encantar.

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6. Disfruta el paisaje en Binissafúller

En Binissafúller | ©Julien Vanbelle
En Binissafúller | ©Julien Vanbelle

Binisafuller es una cala urbana ubicada a los pies de un concurrido sector. Se trata de una cala solitaria que suelen visitar los habitantes de las zonas próximas y es interesante por su fácil aparcamiento y comercios de comida próximos.

Si vas de visita a Binibeca vale la pena darte un pequeño paseo y disfrutar del sol, del paisaje y de la buena comida. Para llegar a la playa de Binisafuller puedes tomar el Camí de Cavalls que pasa justo por detrás de esta cala y te deja un buen recorrido de paisajes y sitios bonitos de los que disfrutar. Este camino es especialmente agradable de recorrer si quieres ir caminando, dada su cercanía con Binibeca.

Binisafuller es una playa que puedes visitar incluso si no tienes planes de visitar Binibeca Vell. Dada su cercanía con el Camí de Cavalls puede ser una buena opción si te animas a hacer senderismo por toda esta vía. Recorrer el Camí de Cavalls a pie y pararte en cada una de las calas y playas que encontrarás alrededor es una actividad bastante entretenida y, sobre todo, saludable.

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7. Regresa a la modernidad en Binibeca Nou

Binibeca Nou | ©Exploras
Binibeca Nou | ©Exploras

Binibeca Nou es lo opuesto a Binibeca Vell. Podrás encontrar todo el modernismo y actualidad que no ves en Binibeca Vell. Además, cuenta con una paradisíaca playa que se ubica justo al lado de Cala Torret. Su playa está rodeada de rocas de alturas medianas y bajas, lo cual la convierte en una costa lo suficientemente segura para bañarse en ella con los más pequeños.

Tiene un paisaje idílico con una vista imprescindible. En la orilla de la playa es posible encontrar múltiples chiringuitos. Para llegar a Binibeca Nou puedes usar el transporte público o un vehículo particular. En caso de que escojas llegar a esta playa usando tu vehículo, no tendrás problemas de aparcamiento, dado a que hay un buen lugar donde se pueden aparcar más de 100 vehículos.

El agua de color azul turquesa y la arena fina la convierten en un buen destino para pasar un rato agradable de playa si viajas hasta Binibeca. En sus alrededores cuenta con múltiples opciones de comida para que puedas degustar los más exquisitos y especiales sabores de la gastronomía mediterránea.

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8. Visita el parque acuático Splash Sur

Splash Sur | ©Julian
Splash Sur | ©Julian

Si vas de visita a Binibeca con los niños, puedes tomarte un día entero para visitar un parque acuático como el Splash Sur, que cuenta con una gran cantidad de atracciones acuáticas. Para ir a este parque acuático te recomiendo que reserves tiempo, ya que dentro del recinto podrás encontrar diferentes opciones para comer o tapear.

Un plan ideal para ir con niños a Menorca, ya que cuenta con piscinas con un nivel de agua acorde para los más pequeños y, sobre todo, es un espacio seguro para toda la familia.

Es un club que tiene la posibilidad de recibir asociados, pero en caso de que no estés asociado también puedes disfrutar de una placentera y cómoda estancia dentro. Si estás buscando un poco más de aventura y adrenalina, entonces este parque también llenará todas tus expectativas de entretenimiento.

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9. Degusta comida mediterránea en una terraza

Comida mediterránea | ©Angelo Mossuto
Comida mediterránea | ©Angelo Mossuto

Una actividad que no puedes dejar de hacer es quedarte en una de las terrazas del pueblo tomando alguna bebida o disfrutando de tapas mediterráneas. Hay bares y restaurantes cuyas cartas ofrecen comidas típicas de la zona y, por supuesto, se ubican en sitios privilegiados de la población. Las vistas desde estas terrazas son de las más recomendadas de la isla, sobre todo para ver el atardecer. Este paisaje se convierte en una especie de óleo y sirve de inspiración a las mentes artísticas.

  • Bambú es una de las ofertas gastronómicas que ofrece la isla. Este restaurante es especial porque ofrece a sus clientes una carta japonesa, con platos típicos asiáticos y una amplia gama de combinaciones exóticas que te harán alucinar de solo probarlas. Antes de llegar y pretender comer en Bambú, tienes que tener en cuenta que es un restaurante muy concurrido, por lo que debes reservar.
  • Si estás buscando un delicioso plato fuerte para comer en mitad del día, tienes varias opciones en el pueblo, entre ellas El Pescadito o Sa Musclera.
  • Tampoco puedes dejar de probar la exquisita comida y buen gusto de Sa Cuina de Binibeca & Bar Mar Blau.
  • Para la merienda, puedes acercarte hasta Pastelería Gilda o la Cafetería Binibeca Vell.
  • En caso de que estés buscando un buen lugar para disfrutar de exquisitos cócteles, te recomiendo visitar el B.B Cocktail Bar.

Traveller Tip

Si vas en verano a Binibeca, asegúrate de reservar: hotel, restaurante, atracciones. ¡No dejes que la temporada te pille por sorpresa!

10. Pasa por el embarcadero al final del día

Tarde en Binibeca | ©Carla Varona
Tarde en Binibeca | ©Carla Varona

Para terminar con una visita tranquila al pueblo de Binibeca, te recomiendo acercarte hasta la zona del embarcadero donde podrás ver cómo se mantienen las embarcaciones pequeñas y medianas amarradas al muelle. Es un verdadero espectáculo estar allí en el atardecer o en la noche porque es un espacio que te brinda paz y tranquilidad.

Sentarse en la orilla del muelle y ver cómo las embarcaciones son mecidas por el viento tenue que sopla, es una de las actividades más relajantes que puedes tener en Binibeca, incluso en toda Menorca. Es una vista que definitivamente vale la pena admirar. Nuevamente si todo lo anterior te ha servido de inspiración para fotografiar o pintar, te aseguro que este espectáculo también hará de las suyas.

Una de las cosas que más llama la atención es que es muy pequeño, por lo que da la impresión de que ha sido sacado de un cuento de hadas. Las calles del poblado terminan por desembocar en el embarcadero, por lo que es como una forma ideal para terminar de enamorarte de la zona justo antes de emprender tu regreso.

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