10 cosas que ver y hacer en Bolonia en Navidad
En Navidad, Bolonia se llena de magia gracias a la iluminación de las calles y los mercadillos. Pero la ciudad ofrece muchos más planes para una escapada inolvidable.
Bolonia es una ciudad siempre animada y llena de vida, pero cuando llega la Navidad se transforma en una gran fiesta que se vive de manera especial en la calles. Pasear por la ciudad medieval y renacentista decorada con miles de luces y guirnaldas, visitar alguno de sus belenes o disfrutar de los muchos eventos que se programan para estas fiestas son planes que no puedes perderte.
Después, nada como recuperar fuerzas con un chocolate caliente y un trozo de delicioso pandoro, o con una copa de vino y una tapa de embutidos locales, lo que prefieras. Aún queda mucho por hacer, como recorrer sus mercadillos navideños para comprar figuras para el belén y regalos artesanales o participar como un boloñés más en tradiciones que tal vez te sorprendan. Hay muchas cosas que hacer en Bolonia en Navidad. ¿Quieres conocerlas?
1. Da un paseo para disfrutar de la iluminación navideña
Si pasear por Bolonia en cualquier época del año es un auténtico placer, hacerlo en Navidad deja para el recuerdo postales inolvidables.
Merece la pena abrigarse bien, ponerse calzado cómodo y recorrer con calma la ciudad cuando ya ha caído la noche porque es un auténtico espectáculo visual. Lleva el móvil o la cámara con la batería llena porque no te cansarás de hacer fotos.
Toda la ciudad se viste de gala con millones de luces para celebrar las fiestas. Los pórticos medievales, los palacios, las calles y plazas de Bolonia y hasta las torres Garisenda y Asinelli se llenan de luces y de adornos.
Y, por supuesto, no puede faltar el gran árbol de Navidad. Se coloca en el corazón histórico, junto a la basílica de San Petronio, el patrón de Bolonia.
2. Haz un recorrido por los belenes de Bolonia
Si hablamos de Italia, tal vez te vengan a la cabeza los belenes con Nápoles, que tienen una larga tradición. Pero en Bolonia también tienen su importancia. ¿Sabías que en esta ciudad se conserva uno de los belenes más antiguos del mundo?
Lo encontrarás en la basílica de Santo Stefano. Se trata de una adoración de los Reyes Magos en madera policromada del siglo XIII. En ella se representa la escena a tamaño natural. Es realmente hermosa.
Pero si quieres sumergirte de lleno en la tradición belenística de Bolonia, tienes en la ciudad otras citas importantes. En la basílica de San Francisco, en la de San Petronio o en la Pinacoteca Nazionale también podrás contemplar estas pequeñas joyas tan queridas por los habitantes de la ciudad.
Aprovecha y compra alguna figurita para tu belén
En este recorrido puedes ir tomando ideas para luego diseñar tu propio belén o ampliar el que montas en casa con alguna de estas figuritas. Solo tienes que pasarte por alguno de los mercadillos navideños que se montan en la ciudad. En puestos y también tiendas encontrarás figuras de todos los tipos y tamaños.
Llegados a este punto, te quiero explicar algunas anécdotas realmente curiosas relacionadas con los belenes. La primera, que el belén boloñés auténtico es totalmente artesanal, fabricado en terracota y las figuras no llevan ropajes de tela.
La segunda curiosidad es que tiene algunas figuras típicas. Una de ellas es la “maravilla”, que representa a una mujer con un gesto de asombro ante el pesebre. La otra es el durmiente, un hombre con una botella en la mano que se muestra ajeno a todo.
3. Date una vuelta por los mercadillos navideños
En Bolonia se montan varios mercadillos donde podrás encontrar desde adornos a delicias culinarias de la región. Dedicar unas horas a pasear por ellos es uno de los mejores recorridos por Bolonia de los que puedes disfrutar en estas fechas.
Feria de Santa Lucía
La Feria de Santa Lucía es una de las citas ineludibles en las Navidades de Bolonia desde hace siglos. Tiene nada menos que cuatro siglos de historia y un ambiente increíble. ¿Dónde se celebra? En la Strada Maggiore y el pórtico de la iglesia de Santa Maria dei Servi.
En sus decenas de puestos encontrarás de todo para decorar la casa en Navidad y también algún regalo para tus seres queridos. No solo eso, podrás adquirir dulces típicos, como el torrone, elaborado con almendras y miel, una bomba calórica a la que, sin embargo, es difícil resistirse.
Feria di Natale
El segundo mercadillo navideño que te recomiendo es la Feria di Natale. En sus puestos también podrás comprar adornos, regalos originales y dulces. No te será difícil encontrarlo, se ubica en el corazón de Bolonia, en la Vía Altabella, a un paso de la basílica de San Petronio.
Otros mercadillos navideños
Aún puedes hacer algunas paradas más en este recorrido por los mercadillos navideños de Bolonia. Si eres de los que disfruta buscando y rebuscando para encontrar pequeñas joyas, te recomiendo no perderte la Feria de antigüedades. En ella puedes encontrar artículos antiguos, curiosos y puede que algún regalo original.
Pero si lo que buscas son piezas realmente especiales, deja un hueco para pasear por San Giuseppe COLORART. ¿Qué es? Un mercado en el que solo se ofrecen piezas de artesanía en materiales tan variados como cuero, telas o metales. Encontrarás este mercado en la vía San Giussepe, a un paso del corazón histórico de Bolonia.
4. Visita un pueblo francés
Sí, no hace falta que viajes a la Alsacia francesa para pasear por uno de esos pueblecitos decorados con esmero. Solo tienes que dirigirte a la plaza Minghetti. Allí te espera un pueblo levantado con pequeñas casas de madera decoradas para la ocasión. Como puedes imaginar, es en realidad otro mercadillo, aunque muy diferente a los demás.
Si eres un amante de la buena gastronomía, aquí vas a disfrutar mucho más de lo que imaginas. La boca se te hará agua viendo los expositores llenos de algunas de las mejores delicias de la cocina francesa. Ver y también probar, porque de eso se trata, de ofrecer un pequeño regalo navideño al paladar.
Déjate envolver por el aroma de los brioches o los mejores quesos franceses, prueba las ostras y el champán, entra en calor con un vino caliente o compra macarons para regalar a tu vuelta a casa. Y todo ello, envuelto en un ambiente de lo más típico en estas fiestas. ¿Se puede pedir más?
5. Haz un recorrido gastronómico muy navideño
Bolonia tiene una larga tradición gastronómica y la Navidad es una época fabulosa para descubrirla. Un buena idea para entrar en calor y, de paso darse un buen festín, es hacer alguno de los tours gastronómicos por Bolonia. Descubrirás todo un mundo de sabores y de aromas.
¿Qué delicias te esperan? Una de las más típicas de Bolonia son los crescentine, una especie de empanadillas que se rellenan de mortadela (de Bolonia, por supuesto), salami o queso. También podrás probar los tagliatelle al ragù, los passatelli (una sopa de fideo grueso perfecta para entrar en calor) o la cotoletta (carne de ternera empanada con lonchas de jamón de Parma y queso sobre ella.
Pero como hablamos de Navidad, si tienes la ocasión, no te pierdas los tortellini de capón en caldo. También son típicos el zampone y el cotechino, embutidos de cerdo que se acompañan de una salsa verde o puré.
Y, en Nochevieja, por supuesto, debes comer sí o sí lentejas, que se suelen acompañar de esos embutidos. ¿Y de postre? El panone o certosino, un pan especiado elaborado con miel, frutos secos, chocolate y especias.
6. Sumérgete en el Festival DiMondi
El Festival DiMondi es una de las grandes citas culturales de la ciudad de Bolonia. En su edición de invierno ofrece interesantes eventos, muchos de ellos coincidiendo con las fechas navideñas. Música, deporte, teatro, juegos y propuestas gastronómicas para todos los gustos y todas las edades se dan cita en este festival.
Si alguno de los eventos que se organizan dentro de su programación coincide con tu estancia en la ciudad, no dudes en pasarte por la plaza Lucio Dalla, que es donde tienen lugar. No solo son interesantes, además son gratuitos.
Por cierto, en esa misma plaza, se monta una pista de hielo que hace las delicias de los más pequeños. Con una pequeña curiosidad: realmente no es de hielo, sino de un material sintético que permite ahorrar energía.
7. Disfruta de una Nochevieja especial
En Bolonia puedes vivir una Navidad muy diferente y participar como un habitante más en tradiciones a veces muy antiguas, a veces muy curiosas. Si tu visita a la ciudad coincide con el fin de año, no te pierdas la hoguera del Vecchione. ¿En qué consiste? En quemar una enorme figura de un anciano, el Vecchione, cuando llegan las doce de la noche.
Este enorme muñeco es la representación del año que se va. El fuego se lleva con él no solo el títere, también todo lo malo del año pasado, con la esperanza de que el que entra sea mejor y se pueda vivir libremente y sin lastres. Por cierto, cada año la figura del Vecchione se encarga a un artista diferente, por eso nunca ha habido dos iguales.
Esta es una tradición relativamente reciente, se remonta a la Nochevieja de 1922, pero en apenas un siglo se ha convertido en una de las citas casi ineludibles de la Navidad en Bolonia. Sin embargo, no es una tradición nueva, este inmenso muñeco antes se quemaba coincidiendo con el Carnaval.
¿Dónde se coloca el Vecchione? En la Piazza Maggiore, donde también se organizan espectáculos musicales para recibir al nuevo año por todo lo alto. Por ello, ese es el punto de reunión de miles de boloñeses cada año para celebrar la Nochevieja.
8. Celebra la Epifanía y conoce a la Befana
La Epifanía es una de las fiestas más queridas por los italianos y en Bolonia se vive de una manera especial con una pequeña procesión en la que se recuerda la llegada de los Reyes Magos a Jerusalén. Sin embargo, la gran protagonista de esa noche es la Befana. Seguro que te la encuentras por las calles en la tarde-noche del 5 de enero y te resultará difícil identificarla.
Pero no temas, la Befana no es una bruja, aunque tenga su aspecto y lleve escoba. O, al menos, es una bruja buena, puesto que es el personaje que deja caramelos, dulces y regalos a los niños que se han portado bien.
Por cierto, ya que hablamos de regalos, un pequeño consejo: si tienes que hacer compras, no lo dejes para última hora. Los días previos a esa noche mágica las tiendas suelen estar bastante concurridas y puedes perder un tiempo precioso para disfrutar de la ciudad.
9. ¿Hace mal tiempo? Visita los museos de Bolonia
Visitar los mejores museos de Bolonia es siempre buena idea. En Navidades no solo están abiertos, sino que en muchos de ellos se preparan exposiciones o actividades especiales y siempre interesantes. Por eso, merece la pena dejar unas horas para visitarlos o aprovechar algún día en el que el tiempo sea especialmente desapacible.
Si viajas a Bolonia con niños, un buen plan es visitar el Museo de Prehistoria Donini. En Navidades, además de conocer cómo era este territorio hace miles de años y descubrir a sus pobladores, podrán participar en talleres y actividades lúdicas que les harán pasar un buen rato.
Pero si hay museos que gustan por igual a grandes y pequeños, son los dedicados al mundo de la automoción. No hay que olvidar que en esta zona de Italia nacieron algunos de los grandes fabricantes de vehículos de superlujo, como Ferrari o Lamborghini. Visitar los mejores museos de coches de Bolonia será una experiencia increíble para todos. ¡Seguro!
Y si lo que buscas son experiencias culturales, ya te habrás dado cuenta de que en Bolonia hay arte casi en cada rincón. Por eso, puedes refugiarte del frío en la Pinacoteca Nacional de Bolonia, en el Museo de Arte Moderno o en el Museo de la Historia de Bolonia. En cualquiera de ellos disfrutarás admirando todos los tesoros que guardan.
10. Visita los alrededores de Bolonia
Si tu visita a Bolonia es de varios días, mi consejo es que aproveches para conocer ciudades que están a un paso de Bolonia. Hay muchas excursiones de un día desde Bolonia.
Te encantará el ambiente navideño de Módena, de Ferrara o de Rávena, tan parecido, pero a la vez diferente del de Bolonia. Y, de paso, descubrirás estas ciudades monumentales, que guardan rincones y monumentos espectaculares.
Si estás pensando en que tal vez sea un plan demasiado cansado, nada más lejos de la realidad. Módena y Ferrara están a solo 50 kilómetros de Bolonia y se llega a ellas en menos de una hora. Rávena está algo más lejos, pero no mucho más, a apenas 80 kilómetros.
Consejos para visitar Bolonia en Navidad
Bolonia es una ciudad siempre acogedora, por eso, te vas a sentir en ella casi como en casa. Sin embargo, antes de viajar en Navidad, es importante que tengas en cuenta algunos consejos:
- Lleva ropa de abrigo porque los inviernos son fríos. De hecho, la temperatura media en diciembre se sitúa alrededor de los 4 ºC y las máximas están en unos 8 ºC. A eso hay que sumar la humedad, que hace que la sensación de frío se intensifique bastante.
- Si tienes pensado visitar algún museo, consulta en la página web los horarios y días de apertura. Aprovecha y mira si organizan alguna actividad o exposición especial, sobre todo si viajas con niños.
- Las Navidades son fechas de gran afluencia turística, por ello, la recomendación es reservar con tiempo tanto para las visitas a museos y monumentos como para los restaurantes.
- Si hay una época estupenda para hacer un recorrido en alguno de los autobuses turísticos de Bolonia, esa es la Navidad. Viajar en un vehículo panorámico es una de las mejores formas de disfrutar del ambiente y de la magia de la ciudad vestida con sus mejores galas.
- La agenda cultural de Bolonia en Navidades es amplia. En ella se incluyen desde conciertos de todo tipo a representaciones teatrales, exposiciones y un sinfín de actividades para niños. Si tu estancia en la ciudad es de varios días, te recomiendo consultar la programación, seguro que encuentras algún evento de tu interés.