10 cosas que ver y hacer en Toledo en invierno

Toledo es una de las ciudades más bonitas e impresionantes de España. Con siglos y siglos de historia, la capital manchega atrae a numerosos turistas sea la época del año que sea. Durante el invierno, cuenta con una amplia y variada propuesta de planes para todos los gustos.

Si vas a la Ciudad de las Tres Culturas en Invierno y no sabes cuáles son las mejores cosas para hacer en Toledo, sigue leyendo. Aquí encontrarás actividades divertidas y de lo más invernales, con las que podrás refugiarte de la lluvia u olvidarte del frío.

Desde finales de noviembre a principios de enero, la plaza del Ayuntamiento de Toledo se adorna con diferentes puestos con motivo de la Feria de Navidad. De este modo, si tu visita a la Ciudad de las Tres Culturas coincide con estas fechas, te recomiendo que pases a echarle un vistazo a este evento.

Encontrarás puestos de gastronomía con dulces típicos navideños y otros productos locales, así como belenes, puestos artesanos con bisutería o decoración, actividades lúdicas para familias o talleres infantiles para los más pequeños de la casa. Además de todo lo anterior, la feria cuenta con un carrusel en el que podrás divertirte con los niños.

Puedes realizar este plan como parte de un tour, para organizar en mayor medida tu viaje a la ciudad. Son muchos los tours o recorridos que se pueden hacer en Toledo para conocer su historia y cultura, todos ellos con su propio encanto.

Aprovecha el frío del invierno en Toledo para hacer uno de los planes invernales más típicos: patinar sobre hielo. El Ayuntamiento de Toledo todos los años habilita una pista de hielo para que los vecinos y turistas de la ciudad puedan divertirse durante estos meses del año. Dependiendo del año, la pista de hielo se coloca en un sitio u otro.

Por lo general, la ubicación de las mismas es en el recinto ferial de La Peraleda; aunque otros años ha estado situada en la plaza del Ayuntamiento. La pista cuenta con un equipo de sonido y una tienda de alquiler de patines. Además, hay un club de patinaje que vigila a los visitantes para mayor seguridad.

Más allá de esta pista, también hay otra pista de hielo en el famoso parque de La Vega, el cual se encuentra entre la puerta de Bisagra y el hospital de Tavera. Podrás pasear por el parque e incluso visitar la conocida Casa del corcho, una vivienda del siglo XIX diseñada por el arquitecto Ramiro Amador de los Ríos.

Otro de los mejores planes para hacer en invierno en Toledo es visitar los baños árabes y los diferentes spas que hay en la ciudad. De este modo, podrás entrar en calor al mismo tiempo que disfrutas de un momento de lo más relajante.

Los baños árabes más famosos de Toledo son los de Medina Mudéjar , los cuales se encuentran en la plaza de Santa Eulalia 1, junto a la iglesia de los Jesuitas y al convento de Santo Domingo el Antiguo. Se trata de un baño árabe original, qué conserva un muro islámico del siglo XII, así como los aljibes y los azulejos auténticos del edificio.

El baño árabe Medina mudéjar dispone de varias piscinas a diferentes temperaturas, así como de un servicio de masajes y de un baño turco. También cuenta con un patio en el que podrás tomar el té. Sin duda, se trata de un modo magnífico de huir del frío al mismo tiempo que te teletransportas a la época de la conquista árabe de Toledo.

Los mejores spas de Toledo

Por otro lado, también puedes ir a uno de los mejores spas de la ciudad, el Domus Aurea . Se encuentra en el Hotel Comendador, en la calle Serranillos. En este lugar podrás disfrutar de una experiencia de bienestar, la cual podrás completar con un circuito hidrotermal, masajes relajantes o cuidados faciales.

También destaca el spa Beatriz Toledo Auditorium, que pertenece al hotel con el mismo nombre. Este spa se encuentra más cerca del centro de la Ciudad de las Tres Culturas, en la calle Concilios de Toledo.

Si vas en diciembre a Toledo, te gustará saber que tendrás la oportunidad de poder asistir a la Feria del Dulce. Este evento se celebra desde el año 2017 y tiene lugar en el Centro Cultural de San Marcos. Este edificio se construyó en el siglo XIII, aunque su forma fue evolucionando, hasta que finalmente se convirtió en lo que es hoy.

A lo largo de toda su historia, ha pasado de ser un cuartel de infantería a diferentes dependencias municipales. Sin embargo, el Centro Cultural de San Marcos sufrió fuertes destrozos durante la Guerra Civil Española, por lo que fue vaciado en su totalidad. A día de hoy se utiliza como lugar para exposiciones y eventos.

La Feria del Dulce es sin duda la excusa perfecta para visitar este lugar. Son 7 los conventos y 10 los obradores que participan en la feria, poniendo a la venta dulces típicos de la localidad y más concretamente del periodo navideño.

No hay un plan español más típico del invierno que una merienda a base de churros con chocolate. Como podrás imaginar, son muchas las churrerías que hay en la ciudad. En algunos de los mejores parques de Toledo, encontrarás kioscos en los que podrás comprar churros con chocolate mientras te das un paseo y disfrutas de la vegetación. Sin duda, se trata de un plan ideal para hacer con niños pequeños en Toledo.

Más allá de estos puestos, Toledo cuenta con una churrería por excelencia: el kiosco Catalino. Este establecimiento está situado junto a la Puerta de Bisagra, uno de los principales lugares de interés turístico de la Ciudad de las Tres Culturas.

Importantes personajes de la esfera política española han visitado el kiosco Catalino para poder degustar sus famosos churros con chocolate. El establecimiento cuenta con una terraza con sillas y mesas en donde podrás sentarte a saborear tu merienda.

Oropesa es uno de los municipios más famosos de Toledo. Se encuentra a poco más de una hora de la ciudad y destaca por su carácter medieval, gracias a su patrimonio histórico y arquitectónico. Uno de los principales monumentos es el palacio Condal y el castillo de Oropesa, conjunto arquitectónico de los siglos XIV y XVI.

Es en el castillo de la localidad en donde se celebra el tradicional Mercado de Invierno de Oropesa, que normalmente tiene lugar en el mes de diciembre. El evento ocupa las diferentes salas del castillo, así como el patio de armas del recinto medieval.

A lo largo de todo este espacio, encontrarás diferentes puestos de artesanía en los que podrás comprar piezas de bisutería, así como artículos de decoración o productos gastronómicos típicos de Castilla La Mancha.

Una forma estupenda de huir del frío y al mismo tiempo disfrutar de una sesión de cultura es ir al teatro. El gran Teatro de Toledo es el Teatro de Rojas, el cual se encuentra en pleno casco histórico de la ciudad, en la plaza Mayor. Tiene un aforo de 464 asientos y en él se exponen todo tipo de obras teatrales, así como ópera, danza y cine.

Por otro lado, en el famoso Teatro de Rojas también se celebran conciertos y diferentes eventos de importancia para la ciudad. Durante los meses de invierno, tiene lugar el Ciclo de Teatro Clásico, en el que podrás disfrutar de obras teatrales de esta categoría.

Durante estos meses, también tiene lugar el Ciclo de Teatro y Danza en Familia, un conjunto de obras de estilo teatral y musical diseñadas para todas las edades. Se trata de un plan magnífico para hacer con toda la familia y con el que los niños podrán entretenerse al mismo tiempo que aprenden.

Como ya sabes, Toledo es una ciudad muy rica artística y culturalmente hablando. Gran parte del patrimonio en este sentido se encuentra en los museos de la Ciudad de las Tres Culturas. Son muchos los museos que hay en Toledo, por lo que tienes plan para varios días de tu visita invernal a la ciudad. Este tipo de planes son ideales para hacer en invierno, ya que podrás enriquecerte culturalmente, al mismo tiempo que te proteges del frío y la lluvia.

Uno de los más famosos es el Museo de Santa Cruz, el cual se encuentra en el que en su día fue el hospital de Santa Cruz. Este hospital se construyó en el siglo XV y fue fundado por el cardenal Mendoza. Una de las cosas que más llaman la atención del conjunto arquitectónico es su preciosa escalera renacentista.

En los laterales del museo se pueden percibir los impactos de bala que sufrió durante la Guerra Civil Española. En su momento, el hospital de la Santa Cruz se realizó para poder dar cobijo a los niños huérfanos que anteriormente atendía la propia catedral.

Actualmente, en este precioso edificio lleno de historia, podrás descubrir impresionantes obras de El Greco , así como diferentes salas dedicadas a la arqueología. El museo abre de lunes a sábado, de 9:30 a 18:30 horas, aproximadamente. Respecto a los domingos, el horario es únicamente de mañana.

Otros museos de Toledo

Más allá del Museo de Santa Cruz, Toledo también cuenta con otros espacios culturales de gran importancia. Uno de ellos es el Museo del Ejército, el cual está emplazado en el Alcázar de Toledo, compartiendo espacio con la Biblioteca Regional.

El Alcázar se encuentra en la zona más alta de la ciudad y tiene sus orígenes en la época romana. Durante la época visigoda sufrió ciertas modificaciones, así como bajo los reinados de Alfonso VI y Alfonso X El Sabio, época en la que se hace de la fortaleza un alcázar.

El museo ocupa tanto el Alcázar como un edificio moderno, los cuales se unen a través de los restos arqueológicos que se hallaron durante la construcción. En cuanto a la zona del Alcázar, esta se divide en 13 salas temáticas de exposiciones permanentes. En cambio, en el otro edificio, se muestran exposiciones temporales. El horario del Museo del Ejército es de 10 de la mañana a 5 de la tarde, prácticamente todos los días del año.

Por otro lado, en la iglesia de San Román, un precioso templo de estilo mudéjar del siglo XIII, se encuentra el Museo de los Concilios y la Cultura Visigoda. Más allá de la propia Iglesia, la cual es un tesoro por sí misma, el museo contiene una reproducción del conocido tesoro de Guarrazar, el cual se encontró en el municipio de Guadamur. Si quieres conocer esta y otras curiosidades, te recomiendo un tour por la ciudad con un guía local.

Si vas en diciembre a Toledo, te gustará saber que tendrás la oportunidad de poder asistir a la Feria del Dulce. Este evento se celebra desde el año 2017 y tiene lugar en el Centro Cultural de San Marcos. Este edificio se construyó en el siglo XIII, aunque su forma fue evolucionando, hasta que finalmente se convirtió en lo que es hoy.

A lo largo de toda su historia, ha pasado de ser un cuartel de infantería a diferentes dependencias municipales. Sin embargo, el Centro Cultural de San Marcos sufrió fuertes destrozos durante la Guerra Civil Española, por lo que fue vaciado en su totalidad. A día de hoy se utiliza como lugar para exposiciones y eventos.

La Feria del Dulce es sin duda la excusa perfecta para visitar este lugar. Son 7 los conventos y 10 los obradores que participan en la feria, poniendo a la venta dulces típicos de la localidad y más concretamente del periodo navideño.

No hay mayor excusa para entrar en calor que un buen plato caliente. La gastronomía toledana es reconocida a nivel nacional por los exquisitos sabores de sus platos. Por ello, te recomiendo que hagas un tour gastronómico por la ciudad, en el que puedas conocer las recetas más típicas de Toledo en invierno. De entre todos los platos típicos de esta época, destaca la sopa castellana, también conocida como sopa de ajo.

Este plato consiste en un caldo con huevo, pan, ajo, pimentón, laurel y aceite de oliva. Podrás probarlo en los bares y tabernas más típicos de la ciudad. También te recomiendo que pruebes la caldereta de cordero, una receta muy popular en Castilla la Mancha y que se suele realizar con fuego de leña. Para rematar, dale una oportunidad a la perdiz escabechada. En esta receta, la carne de perdiz se cocina con vinagre, lo que le da una textura diferente y muy agradable.

Aprovecha el invierno para meterte en el coche con la calefacción y dirigirte a algunos de los pueblos más bonitos de la provincia. Lo cierto es que la provincia toledana cuenta con innumerables municipios de gran belleza, por lo que no puedo mencionarlos a todos. Sin embargo, voy a recomendar algunos de los más importantes.

El primero de ellos es Consuegra, el cual se caracteriza por sus molinos de viento manchegos y forma parte de la ruta por los Molinos del Quijote. Entre los monumentos que destacan dentro de Consuegra, puedo mencionar el castillo de La Muela, que tiene su origen en la época musulmana y que después se cedió a la Orden de San Juan.

También es conveniente que pasees por el casco histórico, en donde se encuentra la torre del Reloj, la Casa Consistorial y la plaza de España.

Hablando de molinos y de Don Quijote, no puedo dejar atrás el Toboso, un municipio nacionalmente conocido por ser el lugar de nacimiento de la famosa Dulcinea. En este pueblo podrás visitar la casa en la que vivió Ana Martínez Zarco de Morales, mujer en la que se inspiró Miguel de Cervantes para dar vida a su personaje.